martes, 21 de diciembre de 2010

DERECHO CONSTITUCIONAL Y NORMATIVA INTERNACIONAL

Por: Dr. Jaime Hernández

Nuestra Constitución aprobada en referéndum del año 2008, garantiza a los ecuatorianos y ecuatorianas, no solo los derechos que ella expresamente contempla, sino también los que se encuentran contenidos en las Declaraciones, Pactos, Convenios y demás instrumentos Internacionales vigentes. Desde aquí podemos partir y amparamos para demandar la protección de los derechos, mediante la utilización de los siguientes instrumentos: La Declaración Universal de los Derechos planteado por las Naciones Unidas, como un ideal común que todos los pueblos deben acoger, la Declaración Americana de los Derechos y Deberes de la OEA, que aspira la protección internacional de los derechos del hombre, como principio y guía del derecho americano; y los que podríamos ubicar como objetivos o procesales, como son: Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, y Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles, que fueran adoptados por la ONU.
En este contexto y con los fundamentos jurídicos que guían a estas instancias de carácter internacional, se crean varios organismos dedicados a proteger los derechos civiles y políticos, los derechos del ser humano más allá de la soberanía constitucional de cada Estado. Los mencionados Organismos Internacionales revestidos por un carácter oficial, tienen como finalidad y tarea principal, vigilar la observancia, cumplimiento y aplicación de los derechos por parte de los Estados, de esta manera si los Organismos Privados o Públicos no cuentan con la suficiente idoneidad política e imparcialidad que su gestión demanda, los ciudadanos tienen la alternativa de concurrir, a los Organismos creados por voluntad soberana de todos los pueblo del mundo o de América, según el caso amerite, en demanda de una aplicación real de la doctrina de los derechos, la misma que se fundamenta en la dignidad de la persona y sobre todo en el derecho natural que otorga a los ciudadanos las garantías para su supervivencia, conociendo que estos derechos se convierten en la base de la colectividad organizada como Estado, es por esto que reiteradamente se menciona, que el derecho de una persona comienza donde termina el derecho de las demás.
Partiendo del análisis referido, la Constitución del Ecuador al reconocer las normas del derecho establecidas por los diferentes organismos internacionales, también somete las decisiones de la justicia que causaren o provocaren demandas, a que los afectados acudan, luego de agotar todos los trámites internos, a estas instancias internacionales para litigar sus causas en la búsqueda de la administración de una justicia libre de las presiones que hipotéticamente estuviere afectada en el escenario nacional.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Ecuador: Los Escalofrios del Señor Presidente


“Quienes se oponen a la entrega de los campos petroleros son
sindicalistas mafiosos y delincuentes”
Carlos Arboleda, Ministro de Lucio Gutiérrez, junio 2003.

“Créanme ya me estoy volviendo privatizador… ya les estoy entendiendo a los privatizadores”
Rafael Correa, mayo de 2008, Petroecuador.

Se ha limpiado de corruptos… de los pipones de siempre y de los sindicalistas que ordeñaban a Petroecuador como vaca amarrada”
Rafael Correa, febrero 2010.

“Cuando me imagino que sin la nueva Constitución este sería nuestro último año de Gobierno me da escalofríos”
Rafael Correa, carta 27 de septiembre 2010.

Cuando Rafael Correa Delgado (RCD), se bautizó de “forajido[i]” anunció que la sola idea de entregar los campos petroleros “Joyas de la Corona[ii]” al capital extranjero, hubiese sido motivo suficiente para “mandar a su casa al coronel Lucio Gutiérrez”.

El año 2006, en diálogo con el periodista Paco Velasco, actual asambleísta de PAIS, el precandidato presidencial Correa Delgado, sentenció que pretender concesionar el campo Shushufindi, una de las “Joyas de la Corona”, por U$ 40 millones de inversión, era “una traición a la Patria”, “somos idiotas? no nos vean la cara de imbéciles por dios”, exclamó en radio la Luna, fustigando con feroces adjetivos al ex ministro privatizador del régimen gutierrista, Coronel Carlos Arboleda. Desde entonces, algunos izquierdosos y otros osos,proclamaron a Correa, como el heredero de la revolución ecuatoriana y enfilaron hoces, martillos, tonadas rebeldes y un río de votos hasta convertirlo en “El Señor Presidente”.

Sepultado el proyecto privatizador de Gutiérrez-Arboleda por la rebelión de los forajidos, “el descamisado” como se lo recuerda al exministro -por haber desafiado a los trabajadores petroleros rompiéndose la camisa- debió palidecer dos años en las mazmorras de la Penitenciaría de Guayaquil, hasta que el magnánimo Rafael, el año 2008, dispuso a la suprema Asamblea Constituyente de Montecristi,amnistía y perdón para el Coronel privatizador. Recuperando el color de la libertad, hoy Carlos Arboleda goza de especial confianza del Presidente Correa, tanto que parece haber contribuido a la revolución petrolera, con su modelo de concesión de las “Joyas de la Corona”,elaborado el año 2003 por el bufete neoliberal Pérez-Bustamante.

La naturaleza pone el barro y el destino los moldea a imagen y semejanza.

En junio de 2003, los “mafiosos” trabajadores de Petroecuador, resistieron el proyecto privatista de Gutiérrez-Arboleda, entonces toda la partidocracia aplaudió a los coroneles, mientras, el joven economista Rafael Correa daba conferencias y se codeaba como amigo de los apestados sindicalistas. Decenas de trabajadores fueron despedidos, perseguidos y enjuiciados por terrorismo y sabotaje por el régimen gutierrista. “He tomado la decisión de que los cinco campos(Joyas de la Corona) se contraten con la mayor urgencia por el sistema de obras y servicios específicos", así ratificaba Lucio Gutiérrez, la privatización de los campos petroleros.

El tiempo pasa y dos senderos: el cuartel y la academia se juntan, dando el pecho a los impíos del pasado, abriéndose la camisa a la modernidad, con los mismos botones privatistas de muestra. Tres días antes del “Golpe de Efecto” del 30 S, Rafael Correa escribió su cimera confesión ideológica, con la sinceridad escurrida por la incontrolable pluma de su boca, una epístola bursátil que al raspar sus letras con algo de prolija dignidad, nos agarra un dolor como el de remorderse el dedo con la puerta de la Catedral.

La noche del 30 S, con ocho vidas menos en la Patria, la ráfaga populista de Correa acusó a Gutiérrez de haber liderado el Golpe, mientras entre la chiquita muchedumbre de la Plaza Grande, la voz de Carlos Arboleda completaba el coro del grupo Pueblo Nuevo: venceremos, venceremos, mil cadenas habrá que romper. ¡Tanto te necesito Lucio que tengo que gritar cuanto te odio!, dirá Rafael cuando está solo, tan solo que hasta él mismo se haga falta.

Mixturados el frío y el calor enferman de escalofrío al Presidente, quien colgado del “sentido de la urgencia”, característica del buen revolucionario, confiesa y advierte ante el púlpito aceitoso del poder, que cuatro años no han servido para nada, o casi nada, que no es lo mismo pero es igual: “Cuando me imagino que sin la nueva Constitución este sería nuestro último año de Gobierno me da escalofríos y me decepciona profundamente pensar que no hemos logrado concretar todo lo que proyectamos y en algunos casos ni siquiera hemos iniciado los proyectos”, dice el Primer Mandatario, en carta del 27 de septiembre, dirigida a Manuel Zapater y a Carlos Pareja, Gerente de Petroecuador y Viceministro de Recursos Naturales, respectivamente.

Sí, a Rafael le consume la ineptitud de la burocracia y los tiempos reglados de la formal democracia: cuatro años para nada, ni hemos iniciado los proyectos, se queja refiriéndose a la postergada privatización -léase “delegación” en términos revolucionarios- de los campos maduros “Joyas de la Corona”, siguiendo el épico camino del campo Sacha, delegado bajo su “extenuante esfuerzo” a la empresa Río Napo, controlada por la venezolana PDVSA. Gracias a todos los santos de la Constituyente, que transcribieron el designio de la reelección presidencial, de lo contrario el escalofrío habría degenerado en catarro contrarrevolucionario.

Es que en Petroecuador los trabajadores a más de “mafiosos” son deliberantes, no acatan las órdenes impartidas por el Presidente, cuando dispuso entregar de urgencia: Sacha a Venezuela, Shushufindi a Indonesia, Auca a China; así mandó Rafael, descendiendo del avión indonesio que lo trajo de su viaje por Asia, en octubre de 2008. Y no le hicieron caso, y dejaron que le dé escalofríos, no entienden la filosofía revolucionaria: “Desde inicios de mi Gobierno se marcó como una prioridad estratégica el desarrollo de los Campos Maduros, han pasado casi cuatro años y hasta ahora el único campo que está siendo optimizado es Sacha, dicho sea de paso, fruto de un extenuante seguimiento personal.”, así reza otra pieza de la carta que está conmoviendo al país. Cuatro años perdidos expresa el Presidente, y tanta plata gastada desde el año 2007 en campañas publicitarias asegurando que el petróleo ya era nuestro, y los homenajes a la Marina, con vino rosado, por haber acabado con las mafias y recuperado el petróleo para la Patria? Ahora entiendo los escalofríos de RCD, es que aún no ha podido cumplir su sueño revolucionario de dejar la corona huérfana de sus joyas.

He aquí el ejemplo de eficiencia de la revolución petrolera. Sacha, la más grande Joya de la Corona, entregada con el dedo del amor de Manuela Saenz a Simón Bolívar, teniendo como prólogo el desprestigio a Petroecuador, sus trabajadores acusados de ineptos, mafiosos, delincuentes y melenudos; todo para justificar la entrega de un campo con 500 millones de barriles de crudo liviano, centenares de millones de dólares en instalaciones construidas en 40 años, el más bajo costo de producción del continente 4 U$/BL; por una pírrica inversión anual del U$ 18 millones a cargo de Venezuela, dinero que saldrá de nuestras propias venas. Lleven, lleven, como en las dolientes épocas de la hacienda, con “indios y todo”.

Un año después del abrazo interminable entre Hugo y Rafael, la producción del campo ha caído de 51.600 barriles día, producidos por los “mafiosos” de Petroecuador el año 2009, a 51.200 barriles producidos por los libertarios venezolanos el año 2010; en 365 días no han subido un barril de los 20 mil diarios que ofrecieron incrementar, han perforado apenas 5 pozos, frente a 74 perforados por los “delincuentes” de Petroecuador los años 2008-2009. Los solidarios taladros del comandante Chávez son fríos fierros perezosos que duermen y facturan carísimo a la Patria de Manuela.www.diario-expreso.com/.../
operaciones-rio-napo-no-pudo-levantar-la- produccion-de-sacha/.

Según el diccionario de PAIS, los lentos son contrarrevolucionarios: “La Revolución Ciudadana se caracteriza por hacer las cosas extraordinariamente bien y extraordinariamente rápido”, agrega el Gran Mandatario en su misiva, en la cual no podía faltar la enseñanza legendaria del látigo ilustrador: “Por lo tanto, tienen un plazo de seis meses para que arranque la operación de todos los campos maduros, de incumplirse esto le agradeceré señor Presidente de Petroecuador pedirle a todo su equipo que presente la renuncia. No podemos fallar a esta responsabilidad histórica que tenemos”. Y las cabezas empiezan a desprenderse de sus cuellos, algunas ya volaron cual moderna guillotina robesperiana, primero en los cuellos más serviles, por algo dirán que Rafael prueba el veneno en quien lo acompaña. Los incondicionales del sector petrolero andan con cuello de acero, ensayando turbo, tienen plazo hasta enero de 2010 para eliminar cualquier huella de PETROECUADOR, todo será convertido en mixto: ecua-china, ecua-indonesia, ecua-venezuela, ecua-irán, ecua-vietnam, ecua-angola, ecua-corea, y hasta ecua-colombia podría ser, ahora que Juan Manuel Santos, ya ha dejado de ser agente del imperialismo yanquie.

La guillotina se estrenó en cerca de dos mil trabajadores de Petroecuador, con 20 y 25 años de vida ofrendada en torres de perforación, refinerías, poliductos, terminales, hoy abrazan a sus hijos, congelados en el desempleo, gracias a los escalofríos neoliberales del Señor Presidente. La gran mayoría de mujeres y hombres arrancados de sus puestos, son gente honesta, nacionalista, opuesta a la privatización; ese fue su delito, mientras que los “gansteres” como calificó Correa a los dueños del petróleo, siguen perforando los yacimientos económicos de la Empresa Pública PETROECUADOR, hasta dejarla en hueso pelado.

La más reciente cabeza sacrificada fue la del Gerente de Petroproducción, Rafael Navarrete, quien se negó a entregar la segunda Joya de la Corona, el campo Shushufindi, a Bakrie Kalila de Indonesia.
Sus informes advierten que la citada compañía no reúne los requisitos, técnicos, ni económicos para operar el campo. El caso de Bakrie Kalila, proviene del mundillo delincuencial, como se revela en una investigación de Diario Expreso. El representante técnico de esa empresa fue detenido en el aeropuerto de Quito, por no declarar 11 mil dólares escondidos entre su ropa. El defensor del delincuente es el abogado Alfredo Escobar Triviño, padre del asesor jurídico del Ministerio de Recursos Naturales; el otro defensor es Pedro Freile, ex Vicepresidente de Petroproducción del gobierno de Correa y miembro del círculo de Galo Chiriboga, ex Ministro de Petróleos, actual embajador en España.www.diario-expreso.com/.../petroecuador-le-dice-no-a--bakrie-kalila/.

En julio de 2010 se aprobó sin debate, las reformas a la Ley de Hidrocarburos, orientadas a entregar las áreas de Petroecuador a empresas extranjeras estatales y mixtas. Un pequeño sector de asambleístas de PAIS, liderado por Paco Velasco, se mostró contrario a algunos aspectos del proyecto. El 1 de agosto de 2010, en canal UNO, ante mis propios ojos y mis incrédulos oídos, el Asambleísta Velasco, dijo que ha hablado con el Presidente y el Ministro Pastor, quienes se han comprometido a no entregar ni a empresas privadas, estatales, ni mixtas, nacionales o extranjeras, los campos maduros de Petroecuador.www.ecuadorenvivo.com/2010080155319/economia/villavicencio_pide_al_gobierno_que_revierta_campo_sacha_a_petroecuador.html.

Luego de abandonar la Catedral, con un dolor histórico en el dedo, repaso la carta del Señor Presidente y me invade un patriótico escalofrío por la suerte del ciudadano Velasco, porque si él se mantiene forajido, su cabeza lucirá pública sobre sus hombros revolucionarios, solo hasta enero de 2011, fecha de la última y definitiva muerte anunciada de Petroecuador.


________________________________________
[i] Forajidos: movimiento ciudadano que lideró la caída de Lucio Gutiérrez.
[ii] Joyas de la Corona: grandes campos petroleros operados por la empresa pública Petroecuador: Shushufindi, Auca, Libertador, Cononaco, Lago Agrio y Sacha. Tienen reservas de crudo liviano del orden de 1.500 millones de barriles, de estos campos se produce una tasa diaria de 170 mil barriles, que constituye la principal fuente de recursos económicos para el país. Estos campos fueron nacionalizados de manos de la transnacional Texaco que los operó desde la década del sesenta del siglo veinte. Durante 30 años de gobiernos neoliberales y populistas, todos intentaron privatizarlos o concesionarlos sin lograrlo por la oposición social.

Por: Fernando Villavicencio V.
fevillavi@yahoo.es

lunes, 11 de octubre de 2010

CORREA SE DESESPERA ANTE LA MENTIRA DEVELADA DEL SUPUESTO "GOLPE DE ESTADO" Y EL SECUESTRO…..


Frente a las declaraciones realizadas en la cadena sabatina del 9 de octubre, donde Rafael Correa, en su desesperación, destila todo el odio posible contra el MPD, en mi calidad de Director Nacional del Movimiento Popular Democrático MPD Listas 15, representando a decenas de miles de hombres y mujeres de izquierda revolucionaria que militan en nuestro Partido y que día a día entregan sus vidas por la Patria Nueva y el Socialismo, manifiesto lo siguiente:

Señor Presidente, los hechos suscitados el 30 de septiembre, tienen un UNICO RESPONSABLE, USTED, quien de manera insensata provocó a la tropa sublevada en el Regimiento Quito y luego al grito de: ¡MATENME! instigó AL COMETIMIENTO DE UN DELITO tipificado y sancionado en el Art. 386 del Código Penal. USTED fue quien vetó la Ley de Servicio Público que afectó los derechos de los servidores públicos - policías y militares -; fueron sus asambleístas dóciles y obsecuentes, quienes se allanaron primero y después se negaron a reconsiderar la ley cuando todavía era posible evitar la tragedia. Su prepotencia y arrogancia originaron los hechos, dieron lugar a la protesta, su tosudez y capricho llevaron al sangriento desenlace que el país condena.

Ahora usted nos llama criminales. Pero, ¿Quién tiene las manos manchadas de sangre? ¿Quién se fue a festejar el supuesto rescate, con cánticos y risas de sus aduladores? ¿Quién celebró su “victoria” sobre la memoria de todas las personas que perdieron la vida?. Basta escuchar la opinión de los familiares de los policías y militares fallecidos.
Criminales nosotros los del MPD?.....Cuando se ordena un ataque militar contra un hospital lleno de pacientes, mujeres y recién nacidos, un operativo que violenta EL DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO reconocido por la convención de Ginebra que prohíbe atacar estos establecimientos. ¡NI EN GUERRA SEÑOR PRESIDENTE SE PUEDE HACER ESO! ¡NI EN GUERRA!.

¿Criminales? Cuando se ordena reprimir cualquier protesta social, donde incluso ha habido víctimas fatales como el profesor shuar Bosco Wizuma. ¿Criminales? Cuando se ha reprimido con armas la protesta de los pueblos como en Dayuma, los mineros de Zamora y de los pueblos del Azuay, los trabajadores y artesanos de Chimbo, en la provincia de Bolívar; cuando Usted se dedica por todos los medios que dispone A DIFAMAR E INSULTAR EN VEZ DE GOBERNAR. En su conciencia quedarán los muertos, los heridos, los daños irrogados a la propiedad pública.

El Movimiento Popular Democrático, NO HA SIDO PARTE DEL denominado INTENTO DE GOLPE DE ESTADO. ¡Eso es una farsa, no hubo tal golpe, ni secuestro!. Apoyamos una lucha justa, como siempre lo hemos hecho, a costa de nuestra vida. De nuestras filas muchos han caído como Jaime Hurtado, Pablo Tapia, Jorge Mogrovejo, Luis Naranjo, Douglas Solórzano y otros valerosos militantes, en defensa de los intereses de nuestro pueblo. Sus pataleos y sus amenazas no van a hacernos retroceder, al contrario Señor Presidente, sus ataques nos demuestran que estamos en el camino correcto y nuestro pueblo continua identificándonos como los luchadores populares que somos, no le TENEMOS MIEDO a su prepotencia y arrogancia, tampoco a la represión y persecución de la cual somos víctimas.

Usted que las actuaciones del MPD, son imperdonables. SEÑOR PRESIDENTE, LO IMPERDONABLE ES QUE HAYA TRAICIONADO EL PROYECTO POLITICO DE CAMBIO que apoyaron los trabajadores, la juventud y los pueblos del Ecuador.
Lo que es verdaderamente imperdonable, es que pasen si pena ni gloria y queden en la impunidad los hechos de corrupción de sus ministros, en especial de aquél que se comió los cheques, los ministros de Agricultura, Obras Públicas; así como es imperdonable los millonarios contratos del Estado con su hermano, ¿Quién responde por esas ilegalidades? Hasta ahora ni su hermano, ni usted, ni sus ministros……

Es imperdonable que se entregue las concesiones mineras y petroleras a las transnacionales. afectando seriamente la soberanía. Es imperdonable, que se haya quitado el almuerzo escolar a los niños de escuelas fiscales y continúen cerradas más de cinco mil escuelas y más de seis mil sean todavía unidocentes, mientras usted este año va a pagar puntualmente 900 millones de dólares de la ilegitima e inmoral deuda externa.

Usted dice “Que no nos sigamos calificando de izquierda”. Le pregunto, Señor Presidente, quien es usted para calificar a quien es o no de izquierda. Usted debe saber que el MPD nació hace treinta y dos años, surgió en la lucha contra la dictadura militar, con una propuesta revolucionaria para romper con la dominación extranjera y defender los derechos de las mayorías. Somos consecuentes con nuestros principios, nuestra militancia es de hombres y mujeres honestos, patriotas y revolucionarios; en nuestro partido no encontrará banqueros corruptos, ni grandes evasores de impuestos, tampoco abogados de las transnacionales y de la oligarquía, no encontrará en el MPD, ex colaboradores de los gobiernos oligárquicos de la partidocracia, algunos de los cuales pululan en su gobierno pomposamente autollamado de “las manos limpias y los corazones ardientes”…..

Por supuesto no es de “manos limpias” y menos de izquierda pedir amnistía para Alberto Dahik, obscuro personaje, impulsor del neoliberalismo, involucrado en casos de corrupción de los gastos reservados y responsable, según la Comisión de la Deuda que usted conformó, de perjudicar al país en beneficio de los chulqueros internacionales. Esto, mientras usted criminaliza la protesta social y utilizando el Código Penal de la dictadura militar enjuicia por terrorismo y sabotaje a más de cien dirigentes sociales, indígenas, maestros, universitarios, periodistas, ecologistas, campesinos. Simplemente por movilizarse exigiendo que se cumpla la Constitución de Montecristi.

Ser de izquierda requiere coherencia entre lo que dice y se hace. Usted usa las canciones del CHE (al cual también en vida le acusaron de terrorismo y sabotaje), al mismo tiempo que besa las manos de Hillary Clinton, proclama a viva voz que no es ni anticapitalista ni antiimperialista. De eso estamos convencidos, es suficiente recordar que usted firmó el 2009 los convenios para aumentar la “ayuda” militar norteamericana, que su Ministro de Defensa en semanas pasadas fue felicitado en el Pentágono y como premio, recibió quince millones de dólares de la USAID para el “Plan Ecuador”; basta ver su reconciliación y colaboración con el gobierno de Santos y su silencio inconsecuente frente a la participación de aviones yanquis en el bombardeo de Angostura. Esta tal su nivel de compromiso con los yanquis, que mientras algunos desinformados, otros despistados y usted mismo, sugieren la autoría de la CIA y la USAID en el supuesto “golpe”, a reglón seguido relevan de cualquier responsabilidad al gobierno de Estados Unidos!

Sus ataques y calumnias, no nos va a amilanar, de ninguna manera, al contrario, el reiterado ATAQUE a la IZQUIERDA REVOLUCIONARIA, nos provee valioso material para seguir luchando, para seguir enfrentando su política antipopular, antiobrera, porque CUANDO USTED SE CRISPA, MUESTRA SU VERDADERA CARETA.. y eso el pueblo no se olvida.

EL MPD NO SE VA A ACALLAR PORQUE PERSIGAN, ENCARCELEN O ASESINEN A SUS DIRIGENTES; EN EL PAIS EXISTE UN GRAN SEMILLERO PARA CONTINUAR LUCHANDO POR LA PATRIA NUEVA Y EL SOCIALISMO.

El Presidente Correa, la derecha y el imperialismo deben recordar, que mientras el MPD crece y se desarrolla, en contrapartida, las mentiras, la demagogia, la prepotencia, desgastan al régimen de turno.

Ab. Luis Villacís M.
Director Nacional del MPD
11 de octubre de 2010

lunes, 4 de octubre de 2010

ANTIIMPERIALISMO ROMÁNTICO, ENFERMEDAD DE LA IZQUIERDA CONTEMPORÁNEA

“Primero vencemos al imperialismo, después nos encargamos de la burguesía nacional”

Este neo “etapismo” que se está haciendo moda en América Latina preocupa. Y preocupa mucho más cuando en el discurso de nuestros aliados, la izquierda pasa a ser izquierdismo, y los mapas de Ana Esther Ceceña pasan a ser más importantes en el análisis de la lucha de clases que la realidad concreta de los trabajadores en el ámbito concreto de lo nacional. Eso, según nos han enseñado, es perder la capacidad de aplicar el método dialéctico para entender dónde mismo estamos parados y qué tenemos que hacer.

El reflejo de esta angustia se encuentra en las categorizaciones con que se trató, sobre todo en el ámbito internacional, el análisis de los hechos ocurridos el jueves 30 de septiembre en Ecuador.

Es emocionante la solidaridad internacionalista de cantidad de compañeros que, preocupados ante los reportes de prensa, se lanzaron una campaña contra un golpe de estado en el Ecuador. Sin embargo, a la hora de ese estallido cibernético, en Quito todavía nos preguntábamos qué mismo estaba pasando. En breves horas habíamos pasado de escuchar en radio un pliego de peticiones bastante racionales de la policía, a un escenario de desestabilización institucional con secuestro del presidente incluido.

Aparentemente, ante la solidaridad que estaba encontrando la huelga policial quiteña en otras dependencias de las fuerzas de seguridad a nivel nacional, el Presidente habría decidido resolver la cuestión, personalmente.

La pregunta del millón era: ¿qué le pasa por la cabeza a un presidente para ir a meterse en medio de una turba de 400 policías en huelga y armados hasta los dientes, a ningunearlos por no apoyar a la revolución ciudadana, y amenazarles mostrando el pecho? La imagen remitía a los tiempos de Abdala Bucaram donde en este país se condecoraba a Lorena Bobbit y podía pasar, literalmente, cualquier cosa.

Si hubiese actuado igual en medio de un paro de los indígenas, o de la huelga de ERCO TYRES, los compañeros le caían con piedras y palos, o con herramientas y bulones, no cabe duda. Pero para entender como es el pueblo cuando está furioso, debería saber lo que significa que a uno le toquen el salario, o los ínfimos medios de reproducción social que se tienen. Eso no se les enseña a los hijos de la clase alta guayaquileña, estudiados en Europa y Estados Unidos. Luego irse al hospital de la misma policía que lo atacó, y que, según sus declaraciones, estaba sublevada contra el presidente, parece pecar de inocencia.

Desde el principio, ¿por qué no reunirse en el palacio presidencial como se hizo en todos los otros conflictos de envergadura que hubo anteriormente? ¿Es que otra vez no había ninguna real voluntad de dialogar? O más grave… ¿será que la conspiración es producto de las propias contradicciones internas del gobierno?

Pareciera que el principal responsable de ser secuestrado es el propio Correa, porque por ningún lado hay indicios de que hubiese logística preparada para ir a secuestrarlo al palacio de Carondelet. A menos que exploremos la posibilidad de un involucramiento directo del Ministro del Interior, Gustavo Jalkh, en la conspiración, responsable de la decisión de que el presidente vaya a meterse donde los chapas.

Cuando trascendió el secuestro, los representantes de la ultraderecha (los famosos pelucones) como Jaime Nebot, salieron a declarar su apoyo a Correa y a la democracia. Entonces nos preguntábamos: ¿si ellos no son, quién está detrás de esto?

Y más complejo se puso cuando el comando conjunto de las FFAA declaró su apoyo al gobierno (con la recomendación de que sí modifique la Ley en cuestión) ¿si ellos no tienen la dirección, quién? ¡Peor si enseguida se suman las voces de solidaridad de Santos, Alan García y Hillary Clinton! ¡Antes que la UNASUR, se solidarizó el imperialismo!

Lucio Gutiérrez está en Brasil como veedor electoral, y a más de lo complejo de dirigir un golpe de estado desde un país aliado al gobierno, también declaró que no tiene nada que ver… ¿¿entonces quién??

En el hospital entraba y salía la prensa, los canales internacionales y los ministros. Y uno se preguntaba ¿cómo es posible que esto sea un operativo militar para un golpe de estado si permiten a toda la contrainteligencia visitar al secuestrado? Ni hablar de lo paradójico de permitirle ordenar su propio rescate por cadena nacional.

Ya por la tarde, nos extrañábamos que los medios sólo pudieran transmitir información del gobierno. Aparentemente eso ocurrió también a nivel internacional, porque las fuentes de información que alimentan las noticias y los comunicados son casi en su totalidad, comunicaciones con funcionarios. Homogéneo el discurso: es un golpe de estado, la desestabilización institucional a manos de la derecha. La huelga de los policías es sólo un instrumento de los grupos desestabilizadores.

“Me van a dejar sin juguetes a los guaguas”

Con el pasar de los acontecimientos, el gobierno ha oscilado entre decir que no había tal huelga, que sí era huelga pero estaba operada por la derecha, que había huelga pero esa no es forma de reclamar derechos (para eso están las urnas)… pero lo que se constató en la calle es que había huelga de trabajadores, y aunque nos arda el estómago pensar que también son pueblo, la policía de tropa estaba reclamando por una cuestión salarial y de condiciones laborales. Todas las declaraciones hechas por los sublevados apuntan a eso: reconocimiento de las horas extras, mejora de las condiciones laborales, mantenimiento de los premios por antigüedad, no a la eliminación de las canastas navideñas (con juguetes para los niños), etc. Y que la oficialidad no negocie por ellos.

No vamos a negar que todo mundo en las FFAA es simpatizante de Lucio, y con toda seguridad había gutierristas azuzando a la masa. Y, aunque nunca nos corremos de entender al gutierrismo como una de las peores expresiones de la reacción en éste país, concluir sobre estos datos la existencia de una conspiración del PSP para montar un golpe, es insultante para un militar golpista de a de veras, con capacidad de control real en la FFAA, como Lucio Gutiérrez. Además, ¿dónde estarían los amazónicos vinculados al PSP, que felizmente movilizarían toda la estructura para botar al presidente? En el oriente ni se enteraron de lo que estaba pasando.

Ni siquiera el gobierno ha dado elementos para darle forma a esa hipótesis. Las declaraciones presidenciales en su enlace radial diciendo que “alguien gritó Viva Lucio” y que “había 6 encapuchados de Lucio” parecen franca demagogia.

“¿En defensa de cuál democracia?”

Es en ese escenario que las organizaciones populares del país tomaron posiciones: los sindicatos estaban quemando llantas en las calles, contra el gobierno y la Ley de Servidores Públicos (la misma que afecta a los policías) y frente a la precarización sistemática de los derechos laborales.

Los estudiantes universitarios salieron a movilizarse contra la Ley de Educación Superior (vetada arbitrariamente por el gobierno).

Los indígenas (es decir, sus voceros oficiales, que es la CONAIE, no Pachakutik) se pronunciaron contra cualquier intento de desestabilización institucional por parte de la derecha fuera del gobierno, y en contra de Correa, de sus políticas y de la derecha que está dentro del gobierno. Ni hablar de recoger el slogan de “defender la democracia”, porque esa democracia tiene a sus dirigentes criminalizados con cargos de sedición y terrorismo.

Una parte importante de los sectores organizados en el país están fuertemente distanciados del gobierno y en abierta oposición. En la semana estaban previstas medidas de fuerza en rechazo a la política de gobierno por parte de las Universidades, los transportistas y los sindicatos. El movimiento indígena mantiene un conflicto de más de un año por la privatización del agua, y se está enfrentando duramente a la entrada de las transnacionales mineras en el sur del país, resistiendo represiones violentas por parte de las fuerzas de seguridad.

Más allá de las diferencias, todos concuerdan en que la leña para los estallidos sociales las puso el propio presidente, ignorando todos los procesos de diálogo y consenso alrededor de las leyes al recurrir sistemáticamente a los vetos. Y en el fondo, la conculcación sistemática a los derechos laborales y territoriales, la transnacionalización de la economía, y el salvataje bancario con los fondos de reserva de los trabajadores. La palabra de moda para caracterizar el estilo de gobierno de Correa es “prepotencia”

“En defensa de ésta democracia”

Otras organizaciones se vistieron verde manzana y sacaron algunos militantes a defender la democracia en las calles. Allí se encontraron con los cuadros de la burocracia estatal que salieron a defender los sueldos de U$S 2.000 para arriba que tienen en este gobierno. Aunque al momento de los piedrazos con los policías salieron corriendo del susto a mover sus Toyotas al grito de “¡No! ¡Los carros no!”.

Las masas de militantes de Alianza País nunca llegaron. En el momento que el asambleísta Paco Velazco convoca al pueblo rescatar al presidente, el testimonio de un periodista que estaba frente al hospital fue “no hay mucha gente, unos 1.500, pero están los de la FLACSO”. Reportó luego la prensa oficial que había 5000 personas (¿?). No vimos gente del campo ni de los sectores populares. La ciudad quedó desolada, la gente común y corriente estaba en su casa, y preocupados por la inseguridad que se generó sin un solo policía en funciones.

“El compañero Mariátegui debe estar revolcándose en la tumba”

Es de recordarle a todo mundo, que al imperialismo lo vencemos cuando nos damos la oportunidad de que los explotados asumamos nuevamente el control de nuestras vidas, y eso no lo logramos si no es acabando con los mecanismos que permiten la explotación. Hasta hace pocos años, la necesidad de tomarse el poder para lograr eso no era tan estrafalaria. Más recientemente nos acomodamos a la hipótesis de delegar las tareas a los burgueses buena onda.

Cuando en el proceso de alcanzar ese objetivo lleguen los marines a atrincherarse en Galápagos y en la frontera norte pasen a preocuparnos más los soldados gringos que los compañeros guerrilleros, ahí si estaremos viéndole la cara al imperialismo.

Es comprensible que tengamos, todos, un deseo de potenciar cualquier proceso de cambio que pueda conducir a la transformación real de nuestras sociedades. Pero parece que a esta altura vale la pena poner en cuestión cuales procesos conducen a dónde.

Es bastante claro que la etapa más progresiva del gobierno de Correa ya pasó a ser populismo. Sin embargo, a la izquierda ecuatoriana se le acusa de izquierdismo, funcionalismo a la derecha. Desde la perspectiva de la lucha de clases material y concreta que se vive en el país, la acusación mejor les queda a los que la pronunciaron. ¿Cuándo fue que otra vez empezamos a mirar los procesos políticos con los ojos del poder? Según esas apreciaciones, es tarea de las organizaciones y de los intelectuales de izquierda decirles a los trabajadores que no luchen, porque le hacemos el juego al imperialismo.

Defender acríticamente a Correa como a un mártir antiimperialista, frente a una hipótesis de golpe que más se parece a una brutal desinteligencia política del gobierno frente a los avatares de la lucha de clases en vivo y en directo; y a su vez cuestionar a las organizaciones por no hacerlo, es hacer demagogia de izquierda, o lo que es igual, pugnar en el fondo por una salida socialdemócrata, donde la máxima expresión de la lucha de los pueblos va a ser el ALBA y UNASUR.

Lo grave de todo esto es que corremos el riesgo, si no es ya muy tarde, de convertirnos colectivamente en una izquierda feliz consumidora de los discursos anti neoliberales financiados por el oenegeísmo europeo. Felices con los discursos anti gringos, felices con la modernización del Estado (¡por fin una burguesía nacional siglo XXI!), felices con el desvanecimiento de la lucha de clases y la emergencia de los derechos sociales. Así no tenemos que hacernos cargo de los costos reales de (siquiera pensar en) la revolución y el socialismo.

De esta forma las dirigencias populares podemos seguir cobrando sueldos como técnicos de proyectos (las indulgencias del desarrollo), la intelectualidad puede seguir hurgando en el último recoveco de “El Capital” en busca de nuevas reflexiones para hacer debatir al marxismo con el posmodernismo (aunque sea en términos que los trabajadores nunca van a entender), y esa izquierda (la que alguna vez fue revolucionaria) puede seguir congraciándose con la burguesía, escribiéndole los discursos y enseñándole lo que ha aprendido sobre cómo tratar demagógicamente a los pobres, en los tiempos en que aún actuaba en el campo popular.

Así, todos podemos, felizmente, salir a defender la democracia, luchando contra las oscuras manos del imperialismo y sus agencias, que (aunque no haya huellas tan claras en éste caso) aparentemente se encuentran incomodadas por la radicalidad de éste proceso. Y con la misma felicidad, podemos acusar a la izquierda (léase, los indios y los trabajadores) de ser de derecha y de ser golpistas, por morderse la lengua antes de salir a defender a un burgués humanitario lanzado a la presidencia por la necesidad de las clases dominantes de poner fin a la crisis de hegemonía que vivió en Ecuador por más de 10 años.

Así podemos también seguir otros 20 años ignorando el problema de la tierra y contentándonos con la soberanía nacional (yo igual preguntaría cuál, la que saca a la base de manta o la que firma la entrada de las mineras transnacionales), halagándonos con el acceso al crédito y olvidándonos del salario, mirando con rencor a los gringos y aprendiendo mandarín para someternos en mejores condiciones al nuevo imperialismo.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Los “gran cacao” del siglo XXI





Hugo Jácome

Catedrático de FLACSO

La concentración de la riqueza, en grandes grupos económicos, no es un tema nuevo en la sociedad ecuatoriana. Esa ha sido una de las constantes. Tan es así, que en épocas del auge cacaotero, a las 14 familias que dominaban el negocio y que obtenían enormes ganancias por las exportaciones de la “pepa de oro”, la gente les conocía como los “gran cacao”.

En la actualidad son diez los principales grupos económicos. Durante el año 2009, estos grupos declararon al Servicio de Rentas Internas cerca de 9.800 millones de dólares en ingresos, es decir 1.4 veces más que todos los ingresos tributarios que recibió el Estado en ese año. Estos grupos son, ordenados por el orden de magnitud de dichos ingresos, Corporación La Favorita, Banco del Pichincha, Almacenes Juan Eljuri, General Motors, Cervecería Nacional, Holcim, Exportadora Bananera Noboa, Corporación El Rosado (Mi Comisariato), Industria Pronaca, Consorcio Nobis. Atrás de cada uno de ellos, en su mayoría, hay un pequeño grupo familiar que maneja el patrimonio empresarial y, con esto, los beneficios de su acumulación económica.

De acuerdo con la información de la Superintendencia de Compañías, el 3% de las empresas, las más grandes del país, es decir mil de un total de 38.425 empresas, concentran el 70% de los ingresos empresariales totales, el 73% de los activos totales y el 80% del patrimonio. Sin embargo, apenas dan ocupación a un 10% de la población económicamente activa. Es decir, el grueso del empleo no está en las grandes empresas, sino en las micro, pequeñas y medianas empresas, y unidades productivas del campo y la ciudad.

Al cabo de más de tres años y medio de revolución ciudadana, el modo de acumulación y producción en el Ecuador sigue siendo altamente concentrador. Este es un dato alarmante que no se compadece con la construcción del “buen vivir” y tampoco con la Constitución de la República, que dispone “construir un sistema económico, justo, democrático, productivo, solidario y sostenible, basado en la distribución igualitaria de los beneficios del desarrollo, de los medios de producción y en la generación de trabajo digno y estable”.

Una distribución igualitaria de los beneficios del desarrollo, que puede parecer utópica, al menos debería propender a una mayor equidad en la tenencia de la riqueza, en los circuitos económicos y en la producción. Esto pasa por confrontar la voraz búsqueda de concentración de riqueza en pocas manos, pasa por poner límites al mercado, y pasa por tener claridad que toda revolución económica y social no puede dejar intocados a los grandes grupos económicos. Una ley que combata la concentración económica, monopolios y oligopolios privados, así como a sus prácticas colusorias, tanto como profundas medidas redistributivas, es más que urgente en tiempos de revolución.

Estos aspectos deben ser debatidos a profundidad, a propósito del código de la producción, inversión y comercio que está preparando el Gobierno y que luego pasará a la Asamblea Nacional. ¿Quiénes serán los verdaderos ganadores con esta propuesta? Deberían ser la pequeña y mediana producción, la economía popular y solidaria, las cooperativas, las asociaciones y comunidades, con herramientas e incentivos adecuados para que la correlación de fuerzas económicas dé un giro hacia una mayor equidad, base fundamental del “buen vivir”.

¡Los “gran cacao” de siempre y los del siglo XXI ya han acumulado bastante!

martes, 27 de julio de 2010

LEY REFORMATORIA A LA LEY DE HIDROCARBUROS O LA REEDICIÓN DEL NUEVO FESTÍN PETROLERO


Para la Revolución Ciudadana una mentira dicha mil veces la pretenden convertir en verdad y engañar al pueblo ecuatoriano, al señalar que con esta Ley Reformatoria a la Ley de Hidrocarburos supuestamente se estaría nacionalizando el petróleo.

Nada mas falso; para empezar debemos saber que esta Ley carece de toda legalidad ya que reforma tres materias legales (hidrocarburos, tributario y laboral) en un solo Proyecto de Ley de carácter ordinario, el cual además modifica una Ley orgánica (la de Régimen Tributario), violentando de esta forma la Constitución en sus Arts. 136 y 133 respectivamente.

La nacionalización del petróleo que ha sido una de las banderas más importantes para la izquierda revolucionaria, ni de lejos se contempla en esta Reforma impuesta desde Carondelet; al contrario violenta la Constitución, desde su primer Artículo, el cual determina que los recursos naturales no renovables pertenecen al patrimonio inalienable, irrenunciable e imprescriptible del Estado; asimismo en su Art. 316 dispone que la figura de delegar la participación en los sectores estratégicos a la iniciativa privada, se dará única y exclusivamente por excepción.

Pero según la Reforma, la excepción se convierte en regla al poner en igualdad de condiciones a las empresas estatales y a las extranjeras. Así, la figura de delegación se dará a través de un proceso de licitación, pero no para las empresas estatales de otros países (Art. 8 del Proyecto); con lo que se viabilizará la transferencia a dedo de nuestros campos petroleros a empresas como Petro-Bras, PDVSA y otras de países que integran la comunidad internacional, contraponiendo los intereses gubernamentales de los “círculos rosa” a los altos intereses nacionales y soberanos de nuestra Patria. Asimismo, mediante la DELEGACIÓN se transferirá todos los beneficios de los campos petroleros: transporte por oleoductos, poliductos, gasoductos, su refinación e industrialización (Art. 2 del Proyecto).

Por otro lado es necesario señalar que Petroecuador explota el crudo a un costo de USD 4,25 el barril, mientras las privadas mantienen costos elevados, entre USD 9,69 y USD 37, nada convenientes para el país; lo cual es una razón más para rechazar la figura de DELEGACIÓN a estas empresas privadas que además son ineficientes. Lo que también se contrapone al Art. 261 de la Constitución que dispone solo el Estado central tiene la potestad de administrar los recursos hidrocarburíferos como competencia exclusiva.

Esta reforma además, contempla la disminución de los ingresos petroleros al permitir que el Estado tan solo se reserve el 25% de los millonarios beneficios económicos de las empresas privadas lo que pomposamente lo denominan “margen de soberanía”. Si esto sucede sería uno de los grandes atracos del siglo, además de violar el Art. 408 de la Constitución que textualmente señala en su segundo inciso: “El Estado participará en los beneficios del aprovechamiento de estos recursos, en un monto que no será inferior al de la empresa que los explota”.

Por si esto fuera poco y a pesar de que las empresas petroleras transnacionales le adeudan desde el año dos mil al fisco, un monto cercano a los 780 millones de dólares por concepto de pago de impuestos, la “revolución ciudadana” les premia con la supresión del pago del impuesto a la renta y de regalías petroleras (Art. 27 y 11 del Proyecto respectivamente) contraviniendo lo dispuesto por el Art. 317 de la Constitución

Finalmente, estas reformas establecen una reducción del 15% al 3% de las utilidades de los trabajadores petroleros cuyos derechos son inembargables e irrenunciables según la carta magna en su Art. 326. Por ello el Frente Democrático de Profesionales de Pichincha hacemos un llamado al pueblo ecuatoriano a rechazar la implantación de estas reformas neoliberales de carácter regresivo y a estar atentos a las acciones a realizase de conformidad con el derecho a la resistencia determinado en el Art 98 de nuestra Constitución.

Gustavo Reyes.